Javier Cárdenas nos cuenta en Levántate OK que ha fallecido el hombre más sucio del mundo a los 94 años. Se trata de Amou Haji, un ciudadano de Irán conocido como el hombre más sucio del mundo por no haberse duchado durante más de medio siglo. El hombre, que era soltero, evitaba bañarse por miedo a «enfermarse». De hecho, estuvo hasta 60 años sin ducharse. En 2013 se publicó un corto documental sobre su vida titulado La extraña vida de Amou Haji, lo que hizo que muchas personas en el mundo conocieran su historia.
En el 2014, Haji aceptó someterse a un examen médico en la Escuela de Salud Pública de Teherán. Un proceso a cargo del doctor Gholamreza Molavi, que sometió al hombre a varias pruebas para detectar ETS, Hepatitis y parasitología. Los resultados sorprendieron a los sanitarios. No se detectó ningún resultado positivo de bacterias o riesgo inminente para su salud, a pesar de su avanzada edad. Una de las explicaciones posibles es que el hombre adquirió un sistema inmunológico extremadamente fuerte por sus condiciones.
Lo más probable es que su deceso estuviera relacionado con su dieta a base de carne podrida y agua en mal estado que bebía de una vieja lata de aceite. Su plato favorito era el puercoespín, según afirmó en una entrevista, en la que también reveló que vivía en un agujero dentro de una choza que le habían construido.
El motivo por el que escogió este estilo de vida fue por una serie de «contratiempos emocionales» que sufrió cuando era más joven.